Estamos pasando por una de las peores crisis del siglo XXI. La pandemia del coronavirus ha hecho, entre otras cosas, que los colegios cierren sus puertas suspendiendo las clases presenciales afectando a todos los jóvenes en el mundo.
En Colombia, tal como en otros países, la única solución funcional ha sido emigrar a las clases virtuales, las cuales, como su nombre indica, son aquellas que se hacen por medio de conferencias virtuales en las cuales se presentan las temáticas programadas para el calendario académico del año.
Esta solución tiene muchos problemas en su implementación, pues, muchos no estaban preparados para ella. Este tipo de educación es particularmente difícil para los jóvenes, siendo su primera experiencia. También afecta a los profesores, que no estaban preparados para hacer este tipo de clases en plataformas virtuales de un momento a otro.
Además, no hay que dejar de lado que algunos estudiantes no tienen la opción de conectarse a éstas clases, pues, carecen de conexión a internet al no tener los recursos para pagar este servicio, o están fuera de la cobertura de las empresas prestadoras del servicio. También está el hecho de que algunos profesores no están capacitados para manejar estas plataformas y horarios específicos para cada curso ya que ellos, al igual que nosotros, estaban acostumbrados a las clases presenciales.
Por lo anterior aquellos que pueden conectarse a las clases reciben una enseñanza torpe y con pocas explicaciones de los temas.
Esto es especialmente grave en el caso de los estudiantes de grado once, ya que es su último año escolar, en el cual deben presentar el examen del ICFES que les abrirá o cerrará puertas universitarias.
Por medio de la virtualidad nos estamos quedando estancados en los temas, no estamos aprendiendo con la suficiencia de las clases anteriores, lo cual deja a los estudiantes menos preparados para afrontar esta prueba estatal tan importante para su futuro.
“Pruebas SABER 11 2020, evaluación a nuestro proceso virtual”
Por: Michel Stiven Barreto Cruz
Como conclusión final, desde que estamos en clases virtuales nuestro aprendizaje depende de cada uno, puesto que hemos pasado de tener 40 horas escolares por semana a un promedio de 4 por semana, así que cada uno tiene que ampliar conocimientos por separado , lo cual es más difícil y menos productivo ya que muchos estudiantes tienen que estar haciendo trabajos escolares y estar pendiente del hogar o hermanos, entonces la pregunta que ronda en la mente de muchos es ¿estamos preparados para afrontar el ICFES y la vida universitaria con los pocos conocimientos adquiridos este año? Por lo que veo no, desde mi punto de vista como estudiante creo que los puntajes de esta prueba no van a ser los deseados por muchos.