Inclusión En Tiempos De Pandemia

La pandemia del Covid – 19 trajo consigo nuevos retos para la humanidad es así como para la crisis económica se mitiga con la reinvención, para la propagación del virus la solución fue el aislamiento social inteligente y para la inclusión social, ¿qué estrategia adoptamos…? Pues controversialmente las limitaciones y la resiliencia que caracteriza a las personas con condiciones diferenciales nos tocaron a todos por igual, es así como muchas de las personas que creían que jamás iban a sufrir alguna forma de exclusión, este fue el momento y una muestra de que todas y todos somo iguales.

Las reuniones virtuales permitieron la integración de muchos, y a su vez la exclusión de algunos por razones tecnológicas de cobertura, accesibilidad o acceso a equipos de cómputo o de como dirían algunos de un simple celular. Otros casos son de segregación por no conocer de redes sociales sobre todo de aquellos que no consideraba una realidad movida a través de pantallas y mucho menos que tuviéramos que hablarle a un montón de avatars o como la comunicación a través de mensajes de emoticones, que para muchos de nosotros no dicen nada en verdad son parte del lenguaje grafico muy complejo, así mismo nos familiarizamos con frases como apaguen las cámaras para mejorar la conexión o por favor silencien los micrófonos y levanten la mano.

Lo que para muchos ha sido nuevo, no lo es para aquellos que por su condición diferencial es algo rutinario, por ejemplo la persona ciega que reconoce a sus interlocutores a través de sus palabras y las recrea como avatar en su imaginación , en las personas sordas también

tenemos una similitud con los emoticones que nos comunican con gráficos lo que en el lenguaje de señas son gestos, sentimientos y con la misma complejidad vencer la barrera que los separa de la sociedad oyente, para la discapacidad intelectual la mejor comparación a los retos de la pandemia es como se siente aquella persona que tiene mucho conocimiento de alguna ciencia, arte u oficio pero que no sabe manejar las nuevas formas de comunicación y que en la nueva realidad tienen deficiencias respecto de lo tecnológicamente complejo de las TIC, que tal vez manejan mejor los educandos que no son tan versados pero que por aquello de la brecha generacional les llego su momento para destacarse.

Otro reto para la educación es entender que el futuro es ahora, que si la enseñanza incluyente se hacia en la presencialidad, se debe continuar en la virtualidad, es así como la discapacidad se elimina cuando se rompen las barreras actitudinales, entiéndase que la inteligencia artificial nunca entenderá sentimientos y que jamás se puede olvidar que detrás de la pantalla llena de avatares, emoticones o de una llamada telefónica hay una persona que tiene derechos, que necesita ser tenido en cuenta como parte de un todo, que si hay que valorar el esfuerzo, las habilidades para la vida y las artes.

El concepto de inclusión es otro reto de entender ya que no es integrar o ayudar, es tan sencillo como ser personas y que como personas queremos ser tratados, que, aunque no pensemos de la misma forma, que no tengamos la misma talla o simplemente no corramos igual, tenemos un espacio en la sociedad y por lo tanto tenemos mucho que aportar cada uno desde sus capacidades.

Para dar el siguiente paso en la evolución humana debemos ser simplemente humanos, nunca olvidemos quienes somos, que tan frágiles e imperfectos podemos ser y que, así como la vida cada día nos da la oportunidad de vivir, también nos pone duras pruebas y que solos son más difíciles de superar.